Esto no te lo has planteado nunca, pero ¿sabes lo que pensaban los privilegiados que probaron a desplazarse en coche a principios del siglo XX? Que eran insufribles para los pasajeros y conductor: incómodos por las vibraciones y hacían un ruido insoportable.
Circulaban por caminos de tierra que habían abierto los caballos y carros y eso tampoco ayudaba a que se pudiesen calificar como confortables.
Por suerte para los pasajeros, tenían muy poca autonomía y el traqueteo duraba poco. La suerte para los transeúntes es que había pocos que circularan por las ciudades.
Esto es algo que pocas veces se dice. Porque en realidad fue una auténtica revolución en lo que al transporte se refiere. Los beneficios superan las desventajas.
Sin embargo, hoy en día un viaje en coche, moto o incluso los trayectos de profesionales en camiones y furgonetas, son un auténtico placer. Gran parte del mérito lo tienen unos pequeños bloques de material flexible que absorbe vibraciones, los conocidos como silentblock.
El origen de los silentblock se atribuye a Walter Chrysler, fundador de la mítica compañía. En 1932 presentó un modelo de Plymouth que incluía una novedad: había conseguido reducir la vibración de un motor de 6 cilindros.
Colocó unos soportes de goma en la base de apoyo del motor, lo que reducía mucho los golpes por vibración. No solo se transmitía menos movimiento del motor al chasis del coche, sino que además hacía menos ruido y prolongaba la vida de las piezas metálicas al sufrir menos golpes.
Utilizamos el término en inglés para referirnos al silentblock. Su traducción directa es bloque silencioso. Está fabricado de un material flexible como el caucho o también puedes encontrarlos de un tejido de hilos de acero inoxidable. Ese tipo de material tiene la capacidad de absorber los impactos y reducir la transmisión de vibraciones provocadas por el motor.
En los vehículos hay tantas piezas metálicas sometidas a vibraciones y roces, que hay multitud de silentblocks en ellos. Se utilizan estos bloques de goma en las bisagras de las puertas, los parachoques, las uniones con faros, parabrisas y ventanas, etc.
Sin embargo, los más importantes y también los más críticos son los siguientes:
Reducen las vibraciones de las diferentes piezas del motor cuando está en marcha.
Si notas ruidos metálicos o chirridos en las curvas, o cambios en la suspensión, quizá es que ha llegado el momento de sustituirlos.
Evitan que se transmitan a la cabina los golpes por baches o irregularidades en la calzada.
Como está en contacto directo con el motor, bloquean las vibraciones y golpes al acelerar y frenar. .
Si tienes un mínimo de sentido común, vas a saber que tienes que reemplazar alguno de los silentblock del coche cuando escuches ruidos metálicos al circular.
Aunque lo ideal es no llegar a ese extremo y sustituirlos antes de que fallen, ¿no te parece?
¿Y cuándo sabes que ha llegado ese momento? Para determinar cuánto duran los silentblock, y cuándo hay que cambiarlos, hay varios factores que influyen (que veremos en el siguiente apartado)
Es recomendable hacer una inspección visual cada 50.000 Km. Al menor síntoma de deterioro o grieta hay que cambiarlos.
Según de qué silentblock se trate y del uso que se le dé, los fabricantes recomiendan su sustitución entre los 50.000 y los 120.000 kilómetros.
Piensa que si el silentblock se rompe, las piezas del vehículo chocarán entre sí y si llegan a romperse la broma en el taller no te va a hacer ninguna gracia.
Con diferencia, lo más caro de la sustitución de silentblocks es la mano de obra. Las piezas de recambio son baratas, pero hay que desmontar y volver a montarlo. Así que si se te da el caso de que se te rompa o deteriore un silentblock de la suspensión, aprovecha para cambiarlos todos y te curas en salud.
¿Hay algo que puedas hacer como conductor para alargar la vida de los silentblock de tu coche? Sin duda la respuesta es sí, toma nota.
Como siempre, la prevención es primordial. Al comprobar los silentblock se puede aprovechar para cepillarlos y retirarles la suciedad acumulada. Además, si escuchas ruidos como de colchón de muelles antiguo, puede que necesiten un pequeño engrasado.
Como acabamos de decir, el tratamiento para superar la amaxofobia debe dejarse en manos profesionales.
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