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Filtro del habitáculo

¿Por qué es importante el filtro del habitáculo?

 

Ubicado en la parte frontal del vehículo, el filtro del habitáculo es el encargado de limpiar el aire que ingresa a la cabina a través del sistema de ventilación. Un filtro en buen estado permite la entrada del caudal de aire óptimo para el funcionamiento del aire acondicionado, al tiempo que retiene la humedad, por lo que mejora su rendimiento. Así, el filtro del habitáculo contribuye al sistema de desempañado que elimina el vaho de las lunas del coche.

 

Esta pieza también recibe el nombre de filtro antipolen, e impide la entrada de los agentes contaminantes que están en suspensión en el aire y que son perjudiciales para la salud de los pasajeros. Los filtros comunes retienen partículas de hollín, polvo, polen y esporas mientras que los de mayor calidad —los filtros a base de carbón activado— también son capaces de captar los gases nocivos propios del tránsito de las ciudades, como el ozono, el dióxido de azufre y el benzol.

 

Al garantizar la calidad del aire en el habitáculo, el filtro antipolen es un elemento clave para garantizar la salud y el confort de los pasajeros, especialmente para aquellos que sufren problemas respiratorios y alergias.

¿Por qué necesito cambiarlo?

 

Un filtro del habitáculo en mal estado permite que las impurezas accedan al vehículo, de modo que se incrementa el riesgo de padecer reacciones alérgicas debido a la presencia excesiva de esporas, polen, hongos y gérmenes.

 

Con el paso del tiempo, la suciedad va saturando el filtro y reduciendo su eficacia. Si el filtro del habitáculo se obstruye, disminuye el caudal de aire y el sistema de ventilación se ve obligado a trabajar de manera forzada. Por tanto, podría generar un desgaste prematuro del compresor y un mayor consumo de combustible.

¿Cada cuánto debe ser cambiado?

 

Es preciso cambiar el filtro del habitáculo cada 20.000 km o según recomiende el fabricante en las indicaciones de mantenimiento de la pieza. No obstante, hay ciertas señales que te advertirán cuándo sustituir el filtro: si percibes un olor desagradable, notas una reducción del caudal de aire y el climatizador no funciona correctamente, o si las lunas tardan mucho en desempañarse.

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